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     El domingo 12 de octubre un grupo de nueve personas pertenecientes a Mujeres Sembrando partió a media mañana al encuentro que se iba a celebrar en el Centro Social Ocupado “La Muela” de Cáceres. Habían sido invitadas por el colectivo que gestiona este lugar que (como puede leerse en la prensa) el Ayuntamiento de Cáceres, entidad propietaria del local, había intentado desalojar hace un año, pero que a día de hoy sigue con sus actividades sociales, culturales o deportivas.

    Esta vez se iban a poner sobre la mesa dos temas candentes y además íntimamente ligados: la tremenda escasez de viviendas asequibles y la pobreza que genera el imparable encarecimiento de los bienes de primera necesidad muy especialmente los alimentos.

     Concurrieron varios colectivos de Extremadura y personas muy señeras en la lucha contra las injusticias como son Alberto Cañedo, que fuera alcalde de Carcaboso o el sacerdote Ángel Martín Chapinal, Delegado Diocesano de personas migrantes y refugiadas de la diócesis de Coria-Cáceres.

     Las representantes de Mujeres Sembrando expusieron las vicisitudes por las que pasan las personas en situación de extranjeras, llegadas de sus países buscando lícitamente una vida mejor, al menos mejor económicamente, y para las que estos dos tremendos obstáculos (la vivienda y los elevados precios de las necesidades básicas) suponen un hándicap que en parte están aminorando gracias a las acciones llevadas a cabo en colectividad.

    Y sí, se hizo mucho hincapié en que el trabajo social (desde una óptica feminista) que se desarrolla en El Sitio de las Mujeres es un claro ejemplo que demuestra como solamente desde la unidadpueden cambiarse las situaciones de abuso y atropello por parte de los poderosos.

    Al final de la jornada, para elevar el ánimo, un grupo de asistentes, de origen africano, organizaron una tamborada tan rítmica como alegre.